Restaurar una vivienda es siempre un problema que requiere de tiempo para supervisar las obras y asegurarse de que todo encaja en el presupuesto del que se dispone. Sin embargo, en muchas ocasiones se olvidan instalaciones fundamentales que serán parte de una vida más confortable y sin problemas para cuando se mude. Sustituir la fontanería en casas antiguas es fundamental para evitar problemas en el futuro como pueden ser fugas de agua, falta de presión o daños por corrosión en el sistema de tuberías.

 

Con el paso del tiempo los materiales que se han utilizado en fontanería han ido cambiando y no se construye igual hoy en día que hace una década. Si la casa en cuestión tiene más de 15 años quizás convenga darle un repaso a toda la instalación que tenga que ver con el agua para comprobar que no existe ningún daño, así como evaluar la posibilidad de invertir en una nueva instalación que evite humedades en el interior de la vivienda o la rotura improvisada de alguna de las tuberías que causaría serios daños en su casa.

 

 

Los daños por agua

 

Prevenir eligiendo una empresa de fontanería seria, que haga una evaluación consciente de lo que necesita su casa es importante para evitar los daños que se pueden producir por agua en su hogar. Una simple rotura de una tubería no solamente producirá problemas a la hora de utilizar el agua, sino también daños en la fachada y paredes interiores. Esto significa que tendrá que reparar las tuberías con el coste que ello suponía antes del problema, pero también todos los daños originados por un error que se pudo haber resuelto antes.

 

Si todavía no tiene una empresa de fontanería de confianza, le recomendamos echar un vistazo a la web de Nurclima y pedirles presupuesto sin compromiso.